El dropshipping se ha convertido en un modelo de negocio que ha revolucionado el comercio electrónico. Su premisa es tan accesible como innovadora, permitiendo poner a la venta productos que no se tienen en stock para comprarlos a los proveedores una vez el cliente ha formalizado la compra, reduciendo el margen de pérdidas al que se expone todo comercio, permitiendo manejar un volumen de datos de ventas mucho más ajustado a la realidad y agilizando el proceso de tramitación de las compras.
¿En qué consiste exactamente el ‘dropshipping’?
El dropshipping ha venido para revolucionar las compras por Internet, mejorando el rendimiento y la eficiencia de las tiendas virtuales sin que ello suponga cambios significativos de cara al consumidor. De hecho, se estima que casi la mitad de los e-commerce que actualmente se encuentran operativos en el mundo han adoptado este modelo de negocio que les permite trabajar de una manera mucho más dinámica, reducir los costes derivados de la compra de excedentes y venta de productos de liquidación.
Aunque de entrada la idea no terminó de cuajar entre el sector más conservador al entender que la venta de productos de los que no se disponía podía sentar un precedente peligrosos que abriese la puerta a compras fraudulentas y estafas, lo cierto es que en los últimos años se ha convertido en un modelo de negocio más seguro y económicamente más beneficioso (el consumidor tiene la oportunidad de adquirir productos directamente del fabricante, no de outlets, al tiempo que el gerente de la tienda reduce gastos innecesarios por adquirir productos que finalmente no venderá), además de mucho más ágil y dinámico.
Claves para montar un negocio de éxito basado en el ‘dropshipping’
Trabajar con este modelo de negocio tiene una serie de ventajas no solo a corto plazo: más allá de las reducciones de precio y de un control más pormenorizado de las ventas y de los beneficios para el consumidor y el propietario del establecimiento, el dropshipping es capaz de garantizar la viabilidad de un comercio a un plazo mucho mayor que el modelo tradicional, ya que permite a su departamento de contabilidad hacer nuevas previsiones de gastos, controlar el volumen de ventas mensual y reducir las inversiones excesivas en productos para su venta.
Una de las claves para asegurar una fructífera trayectoria al comercio es abarcar un gran volumen de oferta, algo inviable con los modelos de negocio tradicionales. El dropshipping se basa en la compra de productos directamente al fabricante, utilizando los servicios de un e-commerce que se encarga de la gestión del producto y su posterior envío al comprador. Por tanto, al manejar una oferta mucho más amplia se permite ofrecer a los consumidores una mayor concentración de productos en un mismo establecimiento sin necesidad de hacer grandes inversiones en productos.
Un ejemplo perfecto de cómo montar un e-commerce de éxito basado en el dropshipping es Tugaveta.com, una de las firmas pioneras en nuestro país en apostar por este modelo de negocio que cuenta en la actualidad con más de 60 marcas de productos en su catálogo para jardinería y decoración del hogar. Productos de cocina, de baño, para el dormitorio, para la terraza o el jardín, pueden ser encontrados en su tienda web a un precio muy reducido, poniendo a disposición del consumidor una alternativa sostenible y eficaz para comprar nuevos productos para el hogar.
Trabajar en las promociones y en una buena comunicación con el cliente es fundamental para que el establecimiento continúe siendo viable. Tener la capacidad de ofrecer productos a precios agresivos es una de las características del dropshipping, lo que eleva la probabilidad de llegar a un público mucho mayor. De hecho, la aplicación de descuentos y promociones es casi una obligación en este tipo de comercios, sobre todo teniendo en cuenta que es Internet el canal principal de comunicación de cara al consumidor. Las nuevas estrategias de ventas dotan al comercio de una mayor flexibilidad durante la promoción de un determinado producto, así como de una mayor capacidad de respuesta ante un eventual fallo en las previsiones de ventas.
La flexibilidad geográfica, otro aspecto clave en los envíos
Disponer de varios centros de trabajo es cada vez más frecuente entre quienes trabajan bajo el paraguas de este nuevo modelo de negocio. Dado que solamente se necesita una buena conexión a Internet y un ordenador portátil para tener controlados todos los aspectos del negocio, los gerentes pueden trabajar desde cualquier parte para gestionar los envíos de los pedidos formalizados.
Esto tiene consecuencias muy positivas tanto para el propio empresario como para los consumidores, ya que para el primero es posible gestionar los envíos desde cualquier parte siempre y cuando tenga una conexión a Internet robusta y eficiente. Para el segundo, es posible recibir los pedidos en direcciones postales distintas, pudiendo tener su compra en cualquier parte del territorio nacional.
Esta ventaja es todavía más pronunciada en todas aquellas empresas que trabajan a nivel internacional bajo el modelo del dropshipping, ya que al operar en todo el mundo es posible gestionar y recibir los pedidos en cualquier parte del mundo.